Amdam observó que las abejas mayores tardaban más que las jóvenes en reaccionar. Y descubrió que poniendo a las abejas mayores a hacer la tarea de las jóvenes, mejoraban su aprendizaje y memoria.
Además aumentó la cantidad de unas proteínas cerebrales responsables del crecimiento, reparación y mantenimiento de las neuronas.
¿Y qué tiene esto que ver con nosotros?
Las neuronas de las abejas son muy parecidas a las del ser humano y algunas de esas proteínas "restauradoras" también están en el cerebro humano
Se espera que este estudio pueda servir para avanzar con seres humanos.
Lo que no sabe el niño es que ahora les toca jugar a la petanca...
Tenéis la noticia en el blog Orientar
No hay comentarios:
Publicar un comentario