El embajador de Bután ante la ONU, Lhatu Wangchuk, ha propuesto considerar la felicidad como indicador del desarrollo de un país.
Así. Como suena.
Desde luego que nuestro indicador actual, el Producto Interior Bruto (PIB), no es muy preciso a la hora de medir lo que necesita el ser humano, dado que sólo mide nuestra dimensión material.
Bután ha propuesto trabajar en la Felicidad Nacional Bruta (FNB), que mide la calidad de la vida, tratando de encontrar un equilibrio entre lo material y lo espiritual.
Me parece una gran idea.
Y promueve una envidia más fundamentada.
Al feliz se le envidia siempre. Al rico sólo cuando es feliz.
En Bután lo tienen claro
Tenéis la noticia en enpositivo
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